Bruni y Sarkozy, quiern controlarel uso a sus imagenes

Sarkozy y Bruni entablaron una serie de demandas por la utilización de su imagen.

Una guerra judicial inédita lanzada por el presidente francés Nicolas Sarkozy y su esposa Carla Bruni para controlar el uso de sus propias imágenes llegó en estos días hasta la remota isla de Reunión, en pleno Océano Índico.

Un tribunal de esa isla perteneciente a Francia le ordenó este jueves a una empresa de ropa pagar el equivalente a US$58.000 a la primera dama por haber impreso su foto desnuda en bolsas de compras.

El fallo es parte de una serie de demandas recientes entabladas por Sarkozy y Bruni para impedir que sus figuras sean empleadas con diversos fines.

Sin embargo, los juicios no siempre han terminado como habrían deseado el presidente y su esposa, personajes evocados de distintas formas por comerciantes, caricaturistas y publicistas.

"Controlarlo todo"

Los esfuerzos del matrimonio presidencial por controlar sus imágenes mediante litigios judiciales son una novedad en Francia y conllevan un mensaje claro, según analistas.

La señal que está enviando (Sarkozy) a los medios de comunicación o a quien sea es: 'Yo mando y digo lo que se puede hacer y lo que no en cuanto a mi vida Anthony Bellanger, Courrier International

"La señal que está enviando (Sarkozy) a los medios de comunicación o a quien sea es: 'Yo mando y digo lo que se puede hacer y lo que no en cuanto a mi vida'", sostuvo Anthony Bellanger, jefe de información de la revista Courrier International.

Bellanger aseguró a BBC Mundo que el jefe de Estado francés "está muy al tanto de lo que se puede hacer con una imagen pública y quiere controlarlo todo".

Sarkozy entabló querellas recientes contra una empresa que lanzó al mercado un muñeco vudú con su efigie y contra el ex jefe de los servicios franceses de espionaje, Yves Bertrand, por citar en sus diarios aspectos de su vida personal.

El jefe de Estado y su esposa, una cantante y ex modelo, también demandaron a comienzos de año a la aerolínea irlandesa Ryanair por publicar una foto de ambos en una campaña publicitaria.

"Error tonto"

El fallo determinó que la empresa Pardon no podía utilizar la imagen de Bruni desnuda.

Los abogados de Sarkozy y Bruni suelen argumentar que sus clientes tienen derechos "exclusivos y absolutos" sobre sus propias imágenes. Y en algunos casos la justicia les ha dado la razón.

En el fallo de este jueves, la corte de Reunión estimó a 9.500 kilómetros de distancia de París que la empresa de ropa Pardon, que imprimió en sus bolsas una famosa foto de Bruni desnuda en 1993, carecía de consentimiento para eso.

También prohibió la venta de las bolsas.

El jefe de Pardon, Peter Mertès, consideró "excesivo" el fallo y dijo que había cometido un "error tonto" al pensar que podía usar la foto porque Bruni-Sarkozy es una figura pública.

En el juicio de Ryanair, la aerolínea fue obligada en febrero a pagar el equivalente a unos US$88.000 a Bruni y una compensación simbólica de un euro a Sarkozy, como había reclamado el mandatario.

Vudú rebelde

Sin embargo, Sarkozy fracasó en dos demandas judiciales para prohibir la venta del muñeco vudú con su efigie, que se vende desde octubre junto a 12 agujas para ser pinchado.

Una corte de apelaciones estimó en noviembre que esa prohibición sería desproporcionada y comprometería la libertad de expresión.

En cambio, la corte obligó a la empresa que comercializa los muñecos, K&B Editions, a incluir en ellos una leyenda que advierte que los mismos ofenden la dignidad presidencial.

Proyectos

El riesgo de enfrentar demandas judiciales parece lejos de inhibir a todos los que se sienten tentados a reflejar las imágenes de Sarkozy y Bruni en diversos formatos.

Hace unos meses, una empresa productora de TV, Endemol France, compró los derechos de dos libros sobre la vida privada de Sarkozy ("Rupturas" y "Carla y Nicolas: la verdadera historia") para utilizarlos eventualmente en un proyecto televisivo.

Más recientemente, la editorial 12Bis lanzó al mercado un libro de cómics titulados "Carla & Carlito", sobre el matrimonio presidencial y el primer año y medio de gestión de Sarkozy, que se vendió como pan caliente.

"Personaje de cómic"

Los cómics muestran a Bruni como una suerte de diva con gran influencia sobre su marido, que es retratado en una gran bañera rodeada de oro, a imagen y semejanza del personaje cinematográfico "Scarface", de Al Pacino.

Lo que me dio la idea de hacer esto es que el personaje político de Sarkozy se parece a un personaje de cómic porque es activista, febril y no para de moverse Philippe Cohen, uno de los autores del cómic

Uno de sus autores, el periodista Philippe Cohen, le explicó a BBC Mundo que algunos escenarios donde transcurren las historietas pueden ser ficticios, pero aseguró que "todo el resto es verdad, no hay ficción".

A su juicio, fue el propio Sarkozy quien ha expuesto al público su vida privada, la misma sobre la que se muestra celoso.

"Lo que me dio la idea de hacer esto es que el personaje político de Sarkozy se parece a un personaje de cómic porque es activista, febril y no para de moverse", comentó Cohen.