Una cámara que "ve" a través de la ropa
Una compañía británica ha desarrollado una cámara que puede detectar explosivos, armas y drogas escondidos bajo la ropa a una distancia de hasta 25 metros.
La cámara, bautizada como T5000, podría ser utilizada en los sistemas de seguridad de aeropuertos, estaciones de tren y otros espacios públicos.
El sistema, desarrollado por la compañía ThruVision, es utilizado normalmente por los astrónomos para estudiar las estrellas moribundas.
Según sus inventores, aunque la T5000 puede "ver" a través de la ropa, no revela los detalles físicos de las personas ni las somete a ninguna "radiación perjudicial", como la asociada a los sistemas de seguridad que utilizan los rayos X.
La cámara utiliza "la tecnología pasiva de la imagen" para identificar los rayos electromagnéticos naturales, conocidos como rayos terahercios o rayos T, que emiten los objetos.
La T5000 será exhibida los próximos 12 y 13 de marzo en una exposición científica organizada por el gobierno británico.
Rayos T
 La T5000 no revela los detalles físicos de las personas. |
A diferencia de los sistemas de seguridad actuales que utilizan rayos X, el sistema de ThruVision utiliza los rayos T.
Esta radiación electromagnética es una forma de energía de nivel bajo que emiten las personas y los objetos.
Las ondas pueden atravesar la ropa, el papel, la cerámica y hasta la madera, aunque quedan bloqueadas por el metal o el agua.
La cámara T5000 funciona mediante la recolección de esas ondas y su procesamiento en forma de imágenes que pueden revelar objetos ocultos.
"Si le analizáramos en función de los rayos T aparecería brillando como una bombilla. Cada objeto brilla con una intensidad diferente", explicó un portavoz de ThruVision.
La compañía ha realizado diferentes versiones de la cámara T5000, aunque la que se presentará esta semana es la primera que funciona tanto en interiores como exteriores
REMATE DE CASAS EN LA FLORIDAMás de mil personas se reúnen un domingo en la mañana en un gran centro de convenciones, sin rasgos distintivos, ubicado a 65 kilómetros al este de Los Ángeles.
Sobre el escenario, un hombre vestido con smoking y pajarita se dirige a la concurrencia. A ambos lados tiene pantallas gigantes en las que se puede seguir el acto.
Esta predicando sobre propiedad y aunque el parloteo de este subastador suena como si estuviese vendiendo ganado, lo que está rematando son viviendas.
Más de 100 casas están a la venta aquí y cada dos o tres minutos se subasta una propiedad.
Casi todos los fines se semana hay remates similares de inmuebles embargados en California, donde los bancos están reduciendo sus pérdidas de millones de dólares por malas deudas.
 La agente inmobiliaria, Julie Bruckner, dice que las casas en remate necesitan amor. |
"Oportunidad"
Hay gangas qué aprovechar. Un hombre dijo que pagó US$375.000 por una casa valorada en US$616.000.
El lote 132 era una casa familiar de cinco cuartos con piscina y estacionamiento para tres autos en La Salle Circle, Corona, un agradable suburbio de clase media al este de Los Ángeles.
Se esperaba que se vendiera por US$400.000. Al final, Cornelius Foster y Debra Moore la compraron en US$500.000; un precio de todos modos menor a los US$700.000 de su valor original.
"Estamos muy emocionados", dice Cornelius. "Tiene piscina y tenemos muchas ganas de mudarnos y arreglarla. Hoy estoy sonriendo".
Sin embargo, ellos también son conscientes de la historia de la casa.
"Nos sentimos mal por la gente que vivió aquí antes", dice Moore.
 Jeannette Lovell dice que los precios de las propiedades han caído rápidamente. |
Es un recordatorio de que, tras muchos negocios buenos, frecuentemente hay historias de desgracias personales.
En una de las casas de La Salle Circle, dos días antes de la subasta, un cartel de una inmobiliaria proclama orgullosamente: "Vendiendo el Sueño Americano desde 1969".
Sin embargo, cuando la agente inmobiliaria Julie Brucknet muestra la propiedad, con sus luces de araña en la sala y un enorme escaparate en el piso de arriba, es evidente que es consciente de una profunda ironía.
"Hay tantas casas vacías en esta área", comenta. "Definitivamente está casa necesita amor y una familia que pueda darle un cariño".
Graffiti y delitos
De hecho, la zona de Corona ocupa el tercer lugar en el índice de viviendas embargadas en Estados Unidos.
En La Salle Circle por lo menos tres propiedades estaban vacías, a la espera de compradores.
 Cartel de una innmobiliaria cuyo eslogan es "Vendiendo el Sueño Americano desde 1969". |
Una de los residentes locales es Jeannette Lovell, de origen británico.
Ella y su esposo no tienen dificultades con la hipoteca, pero aún así, ella se muestra preocupada por el valor de su vivienda.
"Quizás tengamos que trasladarnos a otro lugar por el trabajo de mi esposo", señala.
"Y sé que en los últimos 18 meses, nuestra casa ha perdido US$150.000 de su valor y hay que ver si podemos venderla", confiesa Lovell.
Estas son las consecuencias de la crisis inmobiliaria: el 2% de las hipotecas estadounidenses están en ejecución; algo menos del 6% está en situación de "delito", lo que quiere decir que llevan más de 30 días de retraso en el pago.
Cindy Robinson, otra residente de La Salle Circle, predice más problemas. "Te dibujan un graffiti, y te señalan como criminal de cuello blanco".
El deber de cuidar
Dos puertas más abajo en el vecindario, otra casa embargada acaba de ser desocupada.
 Los inversionistas consideran una "ganga" las casas en remate. |
Quien haya vivido allí, claramente se fue corriendo. El piso está lleno de documentos indeseados, ropa y juguetes de niños y una puerta cuelga de una bisagra de la cocina.
Hay cucarachas y ratones y parte del techo está agujereado por el agua.
Un político en la zona de Corona ha propuesto leyes que exijan a los bancos y otras compañías encargadas de embargar que se ocupen de mantener la propiedad.
La medida le daría poder a las autoridades del condado para imponer multas a los prestatarios que no mantengan las propiedades vacías en buen estado como las que están a su alrededor.
Esto está por aprobarse, a pesar de que leyes similares están en vigencia en otras partes del país.
Subastas lucrativas
De regreso a la subasta, la mayoría de los compradores parecen ser inversionistas aficionados, con distintos grados de compasión por aquellos cuyas casas acaban de comprar.
 Los ganadores de los remates esperan lograr ganancias con las propiedades subastadas. |
Algunos son críticos de los que se han endeudado demasiado en el mercado de vivienda; otros hacen más énfasis en las oportunidades que se les abren para hacer dinero en el mercado de viviendas embargadas.
Todos parecen confiados en que obtendrán una ganancia, o de que los precios de remate quizá reflejen el valor real de la propiedad, y de que el mercado de arrendamientos permanecerá fuerte mientras la crisis continúa.
Mientras tanto, otros están haciendo dinero en este mismo momento.
Con los expertos pronosticando que la cantidad de ejecuciones hipotecarias podrían seguir aumentando en los próximos seis meses, las compañías de remates saben que al menos la suya, es una industria creciente.
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